Sin duda, es uno de los lugares más impresionantes de Formentera. Puede que sea por el faro setentero y la ausencia de civilización en los alrededores o, simplemente, porque el sitio te atrapa para que disfrutes de todo lentamente: las vistas, el silencio absoluto, la cueva, más vistas espectaculares… El caso es que esta no es una visita de “hola, te beso y me voy”… para mí, al menos, Cap de Barbaria, no lo fue.
Dicen que el origen del nombre, Cap de Barbaria, fue debido a su proximidad con «tierras bárbaras» (costas africanas). En castellano, Cabo de Berbería, por el mismo motivo: la proximidad con las costas africanas y el pueblo berebere. Si esto es cierto o simple coincidencia, lo desconozco, pero lo que sí está documentado fueron los múltiples ataques que todas las Islas Baleares sufrieron por parte de “los bárbaros”.
Es el punto más al sur de la isla y se accede por la carretera de Sant Francesc Xavier, no tiene pérdida… Lo realmente pintoresco del camino es ver cómo va desapareciendo todo, podríamos decir que el paisaje se vuelve hasta desértico, pero de una belleza espectacular. Antes de llegar, ya se aprecia que te diriges hacia un lugar especial que incita a la reflexión. En los alrededores también hay una torre de defensa muy bien conservada.
El faro tiene ese encanto particular de haber visto muchas décadas ya… Lo inauguraron en los años setenta y ahora lo controlan de forma remota desde Ibiza.
Una vez allí, tendrás ganas de que el tiempo pase muy despacio para poder disfrutar tranquilamente de las preciosas vistas del faro y del acantilado, que culminan con un mirador natural al que se accede a través de la gruta. Las vistas son espectaculares y los atardeceres desde este punto gozan de una fama excepcional. Hay quienes dicen que son los mejores de las Baleares y, decir eso, no es decir cualquier cosa… Los amantes de la fotografía encuentran aquí infinitas posibilidades, pero también puede ser el lugar perfecto para disfrutar de una buena lectura. Yo me dediqué a mirar el horizonte un buen rato… con la intención de ver tierra, pero no alcancé a ver nada… Lo que sí perdí fue la noción del tiempo jeje
La Cova Foradada, «cueva agujereada» en castellano, se encuentra a pocos metros del faro y es otro referente de Cap de Barbaria. El acceso está en el mismo suelo. Es un lugar mágico porque termina en un mirador natural que quita el sentido. En días claros, se puede ver la Península. Dentro de la gruta, hay montículos de piedras que le dan una atmósfera hippie difícil de olvidar. Esta no es la única cueva que encontrarás en Formentera. Mientras recopilaba información para mi mini-viaje, me llamó mucho la atención que en algunas páginas web comparaban Formentera con un queso gruyère por la composición del terreno: con cantidad de cuevas y galerías subterráneas. Definitivamente, un lugar en el que «perderse»…
¿Quieres saber más de Formentera? En este artículo puedes leer un poquito más sobre la isla.
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