Escrito por: Ana Carolina Squitin.

Antes que nada contarles un poquito de mí, y de esta loca aventurera que vive en mi interior…

Nacida en un pequeño pueblo del Uruguay, desde pequeña, miraba el horizonte y soñaba con darle la vuelta al mundo. Sin razones ni motivos que llevaran a una niña de 8 años a tener un sueño de estas características, sabía dentro de mí que no era como la mayoría, que en mi interior habitaba un gen que me hacía sentir la necesidad de explorar, de descubrir, de ir más allá y aventurarme a lo desconocido.

Busqué de una y mil maneras el modo de compatibilizar mi vida con los viajes y así fue que pasé cerca de 10 años de mi vida en los aires desempeñándome como aeromoza.

Pero eso no era exactamente lo que soñaba, lo que yo quería…

Finalmente, y luego de tomar conciencia que la vida me pasaba muy deprisa persiguiendo cosas que en definitiva no me llenaban el alma, me atreví a dar el paso. Renuncié a mi trabajo, vendí algunas cosas que tenía, compré una camioneta, la acondicioné lo mejor que pude para transformarla en mi hogar, y salí a las rutas.

Hoy hace más de 2 años de aquel día que transformó mi vida y mi visión del mundo por completo. Soy nómada. Y cuando me pongo a pensar el por qué de esa necesidad que nace de lo más profundo de mi ser, me doy cuenta que venimos de generaciones y generaciones de cazadores y recolectores, que por miles de años llevaron una vida nómada, moviéndose de un lugar a otro en busca de alimentos o una mejor vida. ¿Cómo no sentir en mi interior esa necesidad de moverme, de salir, de descubrir otros mundos más lejanos?

Muchos se asombran y alarman al ver una chica viajando sola por el mundo. Pero la realidad es que el hecho de ser mujer no es un factor que complique las cosas, al contrario, en muchos casos lo hace más sencillo. Viajar sola te aumenta las probabilidades de que compartas con las diferentes personas que encuentras en el camino, y lo que es mejor, que aprendas a conocerte, teniendo más tiempo para dedicarte a ti misma, haciendo que descubras un mundo en tu interior que muchas veces no se ve de otro modo por la superficialidad de la vida cotidiana.

″El poder avanzar kilómetros y kilómetros conociendo nuevos lugares, compartiendo con distintas culturas y diversas maneras de pensar, de vivir y de ver el mundo, personalmente me ayudó a ver mi propia existencia desde un punto de vista completamente distinto″.

Cuando salí tenía un millón de miedos contenidos, que desde casa parecían más grandes y graves de lo que en realidad eran. No sabía si sería capaz de lograrlo, si podría enfrentar lo desconocido, si podría sobrevivir y superar los mil y un obstáculos que se podrían presentar… desde problemas mecánicos hasta todos los peligros a los que los noticieros les gusta tanto difundir.

El viaje me demostró que el camino tiene una magia especial. Que todo fluye por sí solo. Que uno es capaz de resolverlo todo, de aprender, de ingeniárselas para superar las piedritas del camino. Que en el mundo hay más gente buena que mala, y que cuando uno avanza con buena vibra, las cosas buenas y las personas llegan a uno.

El viajar sola me ayudó a forjar una confianza muy grande en mi misma. Aprendí que los límites son mentales, y que no existen los imposibles cuando uno sueña de verdad y entrega todo para cumplir ese sueño. Hoy viajo sin planes ni tiempos, descubrí el tesoro más grande que es la libertad de esta vida nómada. Si estás en tu casa leyendo este post, pero soñando con salir, te digo que no lo dudes, vive el hoy.

Como dijo Frida Kalho, “Si hubiésemos nacido para quedarnos en el mismo lugar tendríamos raíces en lugar de pies”.

Las invito a conocer el continente que me vio nacer: mi querida América del Sur.

América del sur les va a dejar maravilladas porque lo tiene todo: montañas, volcanes, glaciares, selvas, cañones, desiertos, salares, lagos y ríos de intenso caudal. Muchas tierras aún vírgenes y una riqueza histórica y cultural increíble, legado de pueblos indígenas milenarios, muchos de los cuales aún habitan el continente manteniendo sus costumbres ancestrales.

Totalmente recomendable para tomarse unos meses y recorrerlo a mochila, o en vehículo como lo hice yo. Tiene la ventaja de que el costo de vida no es muy alto, y uno puede moverse en bus u hospedarse en hostels por muy poco dinero.

Si disfrutas de la naturaleza, te dejo estas 10 experiencias que te harán vibrar y emocionar:

1- Observar de cerca el gigante Perito Moreno.

En plena Patagonia argentina y dentro del Parque Nacional los Glaciareste vas a quedar maravillada de estos hielos milenarios que poco a poco avanzan y se desploman ante tus narices.Périto Moreno

2- Volcanes.

A lo largo de toda la cordillera de los Andes se encuentran decenas de volcanes muchos de los cuales están en actividad y puedes verlos humear o largar lengüetas de lava. No dejes de visitarlos y sentir la fuerza que sale de dentro de la madre tierra. En un marco inigualable, los más bonitos según mi punto de vista son el volcán Villarrica en la ciudad de Pucón, Chile, el volcán Osorno que se levanta majestuoso y nevado a un lado del lago Llanquihue, el volcán Tungurahua en Ecuador, y el hermosísimo volcán Quilotoa que a pesar de estar dormido tiene una laguna verde en su cráter que te dejará maravillada.Volcán

3- Salar de Uyuni.

Le dicen el cielo en la tierra, y es que el estar allí es sentirse realmente entre las nubes.  Kilómetros y kilómetros de sal marina, vestigio de un mar que en algún momento cubrió esas tierras, lo convierten en el salar más grande del mundo. El reflejo del sol en esa sal hacen de Uyuni un paisaje único en el mundo. ¡Si lo visitas, te recomiendo hacer el tour de 3 días recorriendo el salar en un vehículo 4×4 ¡realmente vale la pena pagarlo!Salar Uyuni

4- Lago Titicaca.

El lago navegable más alto del mundo es otro sitio único, emblema de las comunidades indígenas del altiplano peruano y boliviano. Te invito a navegarlo y visitar las islas flotantes de los Uros, Taquile, Isla del Sol y la Isla de la luna con toda su riqueza histórica y cultural.Lago titicaca

5-Arqueología.

En toda América del sur encontrarás vestigios arqueológicos legado de las distintas civilizaciones que han habitado sus tierras a lo largo de la historia.
Si bien la más promocionada internacionalmente es Machu Picchu, construida por los Incas unos siglos antes de la llegada de los españoles, existen muchas otras, incluso más importantes y sorprendentes según mi punto de vista. Las pirámides de Caral (Perú) con una antigüedad de 5000 años, Chan chan, la ciudad de barro más grande del mundo construida por los Chimú, y las misteriosas líneas de nazca, donde también se encuentran pirámides y acueductos construidos por los Nazca.Nazca

6- Desierto de Atacama.

Considerado el más árido del mundo, se extiende por todo el norte chileno pintando la tierra con colores rojo anaranjados y ocres. Formaciones rocosas únicas y un cielo que se abre mostrándote millones de estrellas. Los puntos clave a conocer son El Parque Nacional Pan de Azucar, la ciudad de San Pedro de Atacama que, sin dudas, te enamorará y alguno de las decenas de observatorios astronómicos que se encuentran en la región.254136_1969235424541_3121494_n

7- Playas.

A excepción de Paraguay y Bolivia, todos los países de América del sur tienen hermosas playas para disfrutar. Según mi opinión, las más paradisíacas y con la ventaja de tener calor todos los meses del año, se encuentran en las costas de Brasil, y en el caribe Venezolano y Colombiano.IMG_9378

8- Selva.

Si te gusta la aventura y la naturaleza, en América del Sur encontrarás su máxima expresión. La selva amazónica ocupa gran parte del territorio, extendiéndose por Brasil, Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela.
Una experiencia inigualable, donde podrás ver de cerca cientos de animales autóctonos o visitar comunidades indígenas. Otra alternativa es navegar por el río Amazonas, embarcándote en una travesía de varios días, donde lo único que tienes que llevar es una hamaca que será tu dormitorio durante el viaje, mientras avanzas selva adentro observando de cerca el movimiento de las distintas comunidades que se abastecen a través de los víveres que les acercan a través del río.Chamán

9- La gran sabana Venezolana.

Paisajes de cuentos de hadas, con sus Tepuy , el Roraima y el famoso Salto del Ángel. Sin dudas, otro paisaje único que inspiró a la animación de la película UP (Pixar).

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10- Las Cataratas de Iguazú.

No tendría sentido hablar de América del Sur y dejar afuera este gran contingente de agua que cae por toneladas ofreciendo un espectáculo único que lo hace una de las maravillas del mundo. Ubicadas en la nombrada triple frontera, se pueden visitar tanto del lado Brasileño como del Argentino. Ambas vistas son poderosas y recomendables de realizar y te harán vibrar el alma dejándote sin palabras.Cataratas Iguazú

Si quieres seguir los pasos a Ana Carolina y conocerla más, puedes visitar su blog en www.sehacecaminoalandar.net.

Y tú, ¿quieres ser también nuestra amiga nómada? Aquí te contamos cómo. ¡Anímate!